Banco Central Europeo | El dinero barato por sí solo no es suficiente

El Banco Central Europeo (BCE) ha recortado los tipos de interés ocho veces desde que comenzó a relajar su política monetaria el año pasado. El tipo de interés clave se sitúa ahora exactamente en el 2%. Esto ha sido posible gracias a que la débil economía de la eurozona está frenando la demanda, bajando los precios de la energía y, por lo tanto, manteniendo la inflación bajo control . En mayo, el tipo de interés volvió a caer.

La reducción de los tipos de interés es especialmente positiva para la economía alemana. Unos tipos de interés bajos suelen traducirse en tipos de interés favorables para los préstamos bancarios. De esta forma, las inversiones y los préstamos hipotecarios son más fáciles de financiar, lo que, idealmente, estimula la economía a medio plazo.

Que esto suceda en Alemania depende de otros factores. Por ejemplo, si el "impulso a la inversión" del ministro de Finanzas del SPD, Klingbeil, funcionará o si las exenciones fiscales del gobierno federal simplemente llenarán las arcas corporativas . Este escepticismo también es pertinente para "el mayor programa de infraestructuras de la historia", el fondo especial con un valor de más de 500 000 millones de euros.

No se esperan más ayudas del BCE, es decir, recortes de los tipos de interés. La inflación, del 1,9 %, se sitúa incluso justo por debajo del objetivo, y el tipo de interés de referencia corresponde ahora al «tipo de interés neutral» estimado que el banco central utiliza para orientar su política monetaria.