Un fondo de inversión del Gobierno de Noruega sale de Pemex por las sospechas de corrupción en su contra

Petróleos Mexicanos (Pemex) ha sido excluido del Fondo Global de Pensiones del Gobierno de Noruega debido a las numerosas sospechas de corrupción en su contra. El fondo de inversión más grande del mundo vendió todas sus inversiones de renta fija en la petrolera estatal mexicana, informó este domingo la agencia Reuters. A junio pasado, el fondo poseía valores de Pemex por cerca de 1.443 millones de coronas noruegas, unos 138 millones de dólares. La decisión se tomó después de un duro informe del Consejo de Ética del fondo noruego sobre los numerosos focos rojos de la petrolera sobre sobornos y pagos irregulares a contratistas. El Consejo recomendó al fondo apartar a Pemex de su portafolio debido “a un riesgo inaceptable” de que la petrolera esté contribuyendo o sea responsable de actos de corrupción grave. Desde la trama de Odebrecht hasta el encarcelamiento del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, por la venta fraudulenta de una planta de fertilizantes en Veracruz, el documento da cuenta de los casos más sonados de corrupción de la paraestatal en los últimos 20 años.
Después de horas de mutismo, la paraestatal emitió un comunicado en el que detalla que el fondo noruego había reducido su exposición a Pemex desde tiempo atrás debido al deterioro en la calificación crediticia y temas relacionados con nuevos criterios de la agenda Ambiental, Social y de Gobernanza. La petrolera afirmó que en 2014, el Fondo tenía alrededor de 600 millones de dólares de exposición a Pemex y, al cierre de 2024, el saldo era de 40 millones de dólares. “Pese a que las solicitudes de información del Fondo fueron atendidas por Pemex de manera oportuna, el Consejo de Ética del Fondo mantuvo su recomendación de retirar sus inversiones”, admitió Pemex, por escrito.
Los miembros del Consejo de Ética del fondo revisaron los principales escándalos de corrupción de la paraestatal de 2004 a 2023. El caso más importante y conocido en el que se ha visto envuelta la petrolera está relacionado con el entonces director de la compañía, Emilio Lozoya, y la contratista brasileña Odebrecht. El informe noruego señala que, según su información recabada, Odebrecht pagó entre 2012 y 2014 un total de diez millones de dólares a un alto ejecutivo de la empresa mexicana estatal a cambio de que la constructora brasileña obtuviese un contrato con Pemex.
Otro caso se relaciona con Altos Hornos de México (AHMSA). La información del documento señala que Odebrecht ayudó a transferir a AHMSA unos 3,7 millones de dólares en supuestos sobornos a través de una empresa fantasma. Según las acusaciones, este dinero también fue a parar a manos de Lozoya. Se alega que el desembolso se concretó en 2014, semanas después de que AHMSA vendiera la planta de fertilizantes Agronitrogenados a Pemex a un sobreprecio de 200 millones de dólares. Tras años de juzgados y litigios, en febrero de 2024, Lozoya salió de prisión para seguir su proceso judicial en su domicilio. El caso sigue sin resolverse, y según el fiscal mexicano, Alejandro Gertz Manero, está en un “pantano procesal”.

La petrolera —con un adeudo total de más de 100.000 millones de dólares— también tiene un lastre de acusaciones de sobornos e irregularidades con contratistas. El documento elaborado por el fondo noruego expone las acusaciones de favoritismo a ciertos proveedores y sobornos de otras empresas a cambio de ayuda con los procesos de contratación y la prórroga de contratos de servicios. Las acusaciones y sospechas involucran a numerosos exempleados de Pemex y varios de los casos han culminado en acuerdos judiciales en Estados Unidos. El informe no da una cifra total de los supuestos sobornos en los que se ha visto involucrada la paraestatal, no obstante, indica que si se toma como referencia que Lozoya recibió casi 14 millones de dólares de manera ilegal, los indicios apuntan a sumas sustanciales en actos de corrupción.
En el papel, añade el fondo noruego, Pemex pareciera contar con un robusto esquema de combate a la corrupción. Sin embargo, en la práctica, la petrolera ofrece poca información sobre cómo funciona este sistema. “Pemex no ha compartido información detallada sobre los hallazgos más importantes de su última evaluación de riesgos de corrupción, cómo se lleva a cabo su labor anticorrupción, ni cuántos empleados participan en la prevención de este delito. Pemex tampoco ha compartido documentación sobre la gestión de contratos específicos o denuncias de irregularidades, como lo solicitó el Consejo”, refiere el informe.
Tras numerosas pesquisas, el Consejo de Ética noruego resolvió que los datos de Pemex sobre posibles actos de corrupción y otras irregularidades financieras no es lo suficientemente transparente y aconseja al fondo a desinvertir en la petrolera. “Dado que el exdirector general de la empresa [Emilio Lozoya] ha estado bajo investigación desde 2017 y que la compañía podría estar vinculada a un número considerable de casos de corrupción en los últimos 20 años, el Consejo considera que la política de Pemex es demasiado pasiva en materia de corrupción”, concluye.
El Fondo Global de Pensiones del Gobierno de Noruega cuenta con más de 1,8 billones de dólares y posee el 1,5% de las acciones cotizadas de 8.500 empresas, lo que lo convierte en el mayor inversor individual del mundo. El objetivo del fondo es garantizar la gestión a largo plazo de los ingresos provenientes de los recursos de petróleo y gas de Noruega. Otra parte se invierte en bonos, que son un tipo de préstamo a gobiernos y empresas. El fondo también posee 900 propiedades en importantes ciudades y proyectos de infraestructura de energías renovables.
La salida del fondo noruego de Pemex ocurre en un momento en el que las finanzas y la producción de la paraestatal están contra las cuerdas. A pesar de que el Gobierno de Claudia Sheinbaum ha continuado con el apoyo del sexenio anterior, dotándola de recursos directos del presupuesto, la paraestatal reportó una pérdida neta de 43.300 millones de pesos y una caída en la producción a 1,6 millones de barriles diarios, al primer trimestre de 2025. Agobiada por las deudas y la sombra de la corrupción, Pemex es, desde hace años, un enfermo crítico que requiere de una cirugía mayor.
EL PAÍS