Andrés Calamaro cantó 'Flaca' en inglés y toreó en el escenario: Así se vivió su presentación en Bogotá

“Girl, don’t stab me with your daggers in my back. So deep, they don't hurt me; they don't harm me”: esto dice la traducción de una de las canciones más icónicas de Andrés Calamaro: Flaca (1997). Pero también fue uno de los momentos, que, aunque más esperados, sorprendió a los asistentes a su presentación en el Movistar Arena en Bogotá, el 29 de mayo. El argentino decidió iniciar la canción en inglés, para luego retomar la versión original mientras sus fanáticos coreaban la letra con entusiasmo.

El desafío para el músico argentino en Bogotá no era menor. Días antes, interrumpió, por unos minutos, su presentación en Cali de forma inesperada debido a los abucheos del público, motivados por su abierta afición por la tauromaquia. “Lo siento. Están cancelados y bloqueados. Hasta nunca”, dijo en la Arena Cañaveralejo, en la capital del Valle del Cauca.

La gira Agenda 1999 de Calamaro conmemora los 25 años de su álbum Honestidad Brutal, uno de los proyectos más emblemáticos y determinantes de su carrera. Después de presentarse en Bogotá, en un concierto organizado por Páramo, en Cali, Manizales y Bucaramanga, el artista cerrará su paso por Colombia mañana, 31 de mayo, en Barranquilla.

Horas antes de su presentación, una pancarta colgada en un puente peatonal de la NQS, justo al frente del Movistar Arena, mostraba un mensaje contundente: “Calamaro, Colombia ya dijo ¡no más olé!”.

Pese a eso, los simbolismos del artista y de su pasión por la tauromaquia fueron evidentes durante su presentación en Bogotá. Desde el inicio, los fanáticos lo recibieron mientras gritaban “olé, olé’, Andrés” y lo aplaudían, emocionados por escuchar sus grandes éxitos.

Luciendo una gorra negra y gafas de sol, Calamaro saludó al público y abrió su concierto con la icónica canción Sin Documentos (1993) de su banda Los Rodriguez, creada en 1990.

Fue, entonces, la primera conexión desde el escenario con una generación que creció escuchando su música y recordando una voz memorable de los años 90 y los 2000, la época en la que el rock en español estaba en su máximo furor.

Junto a una banda musical, que él mismo presentó y aplaudió durante su espectáculo, el argentino interpretó canciones como Para no Olvidar (1995), A los ojos (1991) y Mi enfermedad (1991) de Los Rodríguez. Además de otros sencillos que han marcado su carrera como solista: Loco (1997), Te quiero Igual (1999), Cuando no estás (2013), Crímenes Perfectos (1997), Tuyo Siempre (2000), Paloma (1999) y Estadio Azteca (2004).

Tocó unas maracas rojas, el sintetizador, la guitarra, y hasta compartió con el público que había adquirido una nueva Gibson en Estados Unidos, la cual estrenaba en su gira por América del Sur. Recordó también, con cariño, sus presentaciones pasadas en el Parque Simón Bolívar, en una ciudad que, asegura, aprecia profundamente.

“Desde el Simón Bolívar repleto en 2008, todo ha sido fabuloso, espiritualmente hablando. Estamos muy agradecidos. Sé del cariño que Bogotá, Colombia tiene conmigo y con mi banda”, aseguró.

Durante dos horas, los asistentes saltaron, bailaron y cantaron al ritmo del saxofón, las guitarras y los sintetizadores que sonaban en vivo. Al final del concierto, Calamaro levantó un capote sobre el escenario y simuló los movimientos de un torero, acompañado por una música taurina, provocando una ovación del público. Como siempre, la polémica también encontró su lugar en escena.

CAMILO ANDRÉS PEÑA CASTAÑEDA - EDITOR DE VIDA DE HOY Y ANGIE RODRÍGUEZ - REDACCIÓN VIDA DE HOY