El PSOE entra en un cráter radiactivo

El Partido Socialista Obrero Español se halla en el interior de un cráter radiactivo del cual desconoce la profundidad. Los mapas son siempre muy importantes. También los mapas de los escándalos.
Todo indica que la cartografía de la Moncloa no es buena, puesto que la policía judicial no ha informado de sus pesquisas al Ejecutivo. No tiene la obligación de hacerlo, de acuerdo con la ley de Enjuiciamiento Criminal. La citada ley determina que la policía judicial se halla bajo la autoridad de los jueces, los tribunales y la fiscalía. En casos específicos, como los que pueden afectar a la seguridad del Estado, la policía judicial puede informar al poder Ejecutivo.
Los audios grabados por Koldo García, desencriptados por la UCO, transmiten una sordidez explosivaTodo indica que el Gobierno español desconocía la profundidad del informe elaborado durante meses por la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, cuya conclusión más sustantiva -la implicación directa de Santos Cerdán en el presunto cobro de comisiones ilegales- fue filtrada el pasado miércoles a algunos medios informativos. La reacción inmediata del PSOE fue una defensa tajante de la inocencia de su secretario de organización. Con una cartografía más precisa, el Partido Socialista seguramente no habría dado ese paso. Muy probablemente nada sabían de los audios grabados por Koldo García en dispositivos encriptados que la UCO ha logrado abrir. Cabe suponer que el jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, tampoco estaba informado de las indagaciones de la Guardia Civil cuando la semana pasada decidió endurecer su lenguaje y convocar una manifestación contra la “mafia” en la plaza de España de Madrid, concentración que no alcanzó el hito deseado.
El nivel de información del Ejecutivo sobre las indagaciones de la policía judicial ha sido objeto de numerosos episodios de tensión en España, especialmente en aquellos momentos en que la Guardia Civil o el Cuerpo Nacional de Policía han investigado al partido en el Gobierno ante la presunción de acciones o comportamientos ilegales. Hay un importante caso pendiente de juicio al respecto.
Lee tambiénEl mes de mayo del 2026 se iniciará en Madrid el juicio por el caso Kitchen contra once personas acusadas de haber utilizado medios policiales para entorpecer las investigaciones sobre el caso Gürtel que llevaba a cabo la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía, en calidad de policía judicial. El ex ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y el ex secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, encabezan la listas de los acusados y afrontan una petición de 15 años de cárcel. Entre los acusados se halla el inefable comisario Manuel Villarejo. La UCO no ha sufrido una interferencia similar, pero el personaje Leire Díez adquiere una fosforescencia especial a la luz de los que se va conociendo.
El Gobierno se halla visiblemente desorientado. El PSOE se halla en shock. Ayer empezaron a conocerse algunos de los audios atesorados por Koldo García y su divulgación transmite una sordidez que destroza el mensaje de regeneración con el que Sánchez ganó las elecciones primarias socialistas de mayo del 2017 y la moción de censura de mayo del 2018. Santos Cerdán y José Luis Ábalos figuraban entre sus principales colaboradores en ambos eventos. La radiación es intensa en el fondo del cráter. En el momento de cerrar esta edición, Cerdán aún no había renunciado anoche a su acta de diputado. Sánchez anunció el jueves que esa renuncia se va a producir.
El PP también descarta ahora una moción de censura, pero sectores del partido la deseanEl ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, descartó ayer que el Gobierno vaya a someterse a una moción de confianza. No tienen aún cartografía suficiente para dar ese paso. La negociación del voto de confianza con al menos siete aliados parlamentarios podría resultar muy costoso y es posible que algunos de esos aliados tampoco quieran ahora dar un voto de confianza a Pedro Sánchez. Para algunos sería más fácil votar en contra de una moción de censura de Alberto Núñez Feijóo. La dirección del PP también descarta en estos momentos la presentación de esa moción, aunque algunos sectores del partido la desean.
Sin cuestión de confianza o moción de censura el Parlamento quedaría postergado en beneficio de la batalla mediática. La negociación de los presupuestos del 2026 podría ser una fórmula. Pero los mapas aún no están a punto. La legislatura ha dado un vuelco y aún no existe una cartografía precisa del cráter radioactivo.
lavanguardia