'Regenerativa y sanadora': los 4 beneficios desconocidos de la planta 'malamadre'

No solo se destaca por ser una de las plantas más resistentes y decorativas, sino que encierra una serie de beneficios poco conocidos que la posicionan como una aliada regenerativa, purificadora y sanadora.​¿De cuál se trata? ¿Cómo debe cuidarla?

Originaria de Sudáfrica, la planta “mala madre”, también conocida como cinta o lazo de amor, es una especie fanerógama del género Chlorophytum comosum que ha ganado popularidad a nivel global y se caracteriza por sus largas hojas de color verde, blanco y amarillo brillante.

Tal como resalta un artículo del portal especializado Ad Magazine, más allá de su uso decorativo, la “mala madre” actualmente está siendo muy valorada por sus propiedades medicinales y sus beneficios para el ambiente.

Los 4 beneficios de la planta “mala madre”:

1. Purificadora natural del aireUno de los beneficios más estudiados de esta planta es su habilidad para eliminar toxinas del ambiente. Según estudios realizados por la NASA y otras instituciones, puede absorber compuestos nocivos como el formaldehído, el monóxido de carbono y el xileno, mejorando significativamente la calidad del aire interior. Ideal para habitaciones cerradas, oficinas o baños, contribuye a un entorno más limpio y saludable.

2. Propiedades antioxidantes y antiinflamatorias​

Menos conocido, pero igual de importante, es su potencial terapéutico. La planta contiene flavonoides y bufadienólidos, compuestos vegetales que actúan como antioxidantes y agentes antiinflamatorios. Se ha utilizado en la medicina tradicional para reducir síntomas leves relacionados con infecciones y procesos inflamatorios, ayudando al cuerpo a recuperarse de forma natural y no invasiva.

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3. Alivio respiratorio y efecto calmante​Tradicionalmente, infusiones o extractos derivados de la Chlorophytum comosum se han usado para aliviar malestares respiratorios leves como la tos seca o congestión. Aunque aún se requieren más estudios clínicos, usuarios de distintas culturas la reconocen como una planta de efecto suave y relajante, ideal para ambientes que buscan fomentar el bienestar físico y emocional.

4. Renovación energética​

En el plano simbólico, la mala madre también tiene un papel destacado en el Feng Shui. De acuerdo a esta filosofía milenaria, su presencia ayuda a movilizar la energía estancada en los espacios y favorece la circulación del chi, especialmente cuando se ubica en salas, entradas o esquinas oscuras. Aunque su nombre puede sugerir connotaciones negativas —por la forma en que sus brotes cuelgan separados de la planta madre—, cada vez más personas la reinterpretan como símbolo de renovación, autosuficiencia y expansión vital.

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¿Qué otros beneficios tiene esta planta?

No solo se destaca por ser una de las plantas más resistentes y decorativas, sino que encierra una serie de beneficios poco conocidos que la posicionan como una aliada regenerativa, purificadora y sanadora.

Por su parte, su fama suele estar ligada a la facilidad para su cultivo en diversos ambientes y a su aspecto ornamental, investigaciones recientes y usos tradicionales coinciden en resaltar cuatro beneficios clave que la hacen única.

​Sin embargo, tiene características positivas. Además de ser ideal tanto para expertos en jardinería como para quienes están dando sus primeros pasos en el cuidado de plantas, su bajo mantenimiento y su valor estético la convierten en una compañera perfecta para transformar cualquier ambiente en un espacio más saludable, armónico y natural.