La extrema derecha europea ataca a la UE en una manifestación en Loiret

La extrema derecha europea exhibió una fachada de unidad y una retórica agresiva contra la Unión Europea y su política migratoria el lunes 9 de junio, durante una gran manifestación organizada por la Agrupación Nacional (RN) en Loiret. Frente a varios miles de activistas reunidos para el "Día de la Victoria", un año después del triunfo de la RN en las elecciones europeas, los principales líderes de los partidos de extrema derecha del continente emitieron una serie de declaraciones incendiarias.

El primer ministro húngaro, Viktor Orban, marcó la pauta al comparar la política migratoria europea con un "intercambio organizado de poblaciones" destinado a "reemplazar la base cultural" del continente. "No permitiremos que destruyan nuestras ciudades, violen a nuestras niñas y mujeres, ni que maten a ciudadanos pacíficos", declaró ante el aplauso entusiasta de sus simpatizantes, que se jactaban de haber "rechazado a los migrantes " a Hungría.

En este discurso, pronunciado en húngaro y traducido en directo al francés, el líder atacó claramente a la UE, asumiendo su papel de "oveja negra de la Unión Europea" , "la pesadilla de Bruselas" . Instó a la Agrupación Nacional a consolidarse en las próximas elecciones: "Sin ustedes, no podremos ocupar Bruselas (...) No podremos salvar a Hungría de la guillotina bruselense" , declaró Viktor Orbán.

Marine Le Pen continuó describiendo a la Unión Europea como un "imperio mercantil, progresista y ultraliberal" que "impone y oprime" a las naciones. "Es un imperio contra nuestros pueblos", insistió, criticando duramente "la fría, impersonal y autoritaria maquinaria burocrática" de Bruselas.

La líder del RN prometió "poner orden" y "terminar la partida para ganarla", evocando claramente su ambición de ver a la extrema derecha conquistar el poder en Francia y Europa. Describió la política migratoria europea como un "pacto de inmersión migratoria" y una "dilución demográfica " orquestada, al tiempo que rechazó la perspectiva de un "Frexit" y prefirió "cambiar la UE desde dentro ".

Sobre la guerra en Ucrania , Marine Le Pen criticó lo que llamó un " proyecto de guerra programado" por la UE, acusándola de dedicar "toda su energía" a apoyar a Kiev en detrimento de los intereses nacionales europeos.

Jordan Bardella , presidente del RN y cabeza de lista para las elecciones europeas de 2024, cerró los discursos presentándose como un "campeón" de la Europa de las naciones. Elogió la "alianza de fuerzas patrióticas" , convencido de que podría derrocar al Parlamento Europeo y "recuperar el poder de las élites bruselenses" .

La ultraderecha europea estuvo representada al más alto nivel. Matteo Salvini , vicepresidente del Consejo Italiano y figura destacada de la Liga, advirtió sobre una «invasión de inmigrantes ilegales, principalmente islamistas, financiados y organizados en el silencio de Bruselas» , e instó a los «patriotas» europeos a «trabajar juntos para recuperar el control del destino y el futuro de Europa». Santiago Abascal, líder de Vox en España, abogó por una «recuperación de la soberanía» en materia migratoria, denunciando el «pacto europeo sobre migración» como un atentado contra los derechos fundamentales de los Estados.

En la manifestación también participaron líderes de la extrema derecha checa (Andrej Babis), griega (Afroditi Latinopoulou), polaca (Krzysztof Bosak), estonia (Martin Helme) y belga (Tom Van Grieken). El líder neerlandés Geert Wilders, ausente físicamente, envió un mensaje de video felicitando a sus homólogos por su determinación de "cambiar Europa".

Al mismo tiempo, líderes de izquierda, asociaciones y sindicatos se manifestaron en Montargis (Loiret) para oponerse a la gran misa organizada por la Agrupación Nacional, intentando "construir resistencia" frente a rivales políticos que "no son bienvenidos" . Varios miles de personas, 4.000 según los organizadores, marcharon pacíficamente por las calles de la ciudad de Loiret a última hora de la mañana.