Este desierto esconde un fantástico oasis, que se ha convertido en una importante atracción turística.

¿Tienes alma de aventurero y sueñas con descubrir un paisaje extraordinario? Lejos de las mismas playas doradas de siempre y los senderos trillados, prepárate para añadir el oasis más mítico de Sudamérica a tu lista de viajes imprescindibles.
Imagínate en medio de un desierto interminable, rodeado de dunas gigantes que pueden alcanzar entre 300 y 400 metros de altura, cuando de repente aparece ante ti un oasis y su laguna esmeralda, que, según la leyenda, nació de las lágrimas de una sirena...
Este sorprendente lugar es Huacachina en Perú, un oasis vacacional para los habitantes de la ciudad de Ica, ubicada a 5 kilómetros de distancia, desde donde se puede ir en taxi o mototaxi por unos pocos soles peruanos (la moneda de Perú).
El pueblo que rodea la laguna es en realidad solo un puñado de hoteles, pensiones, casas y restaurantes. Tiene apenas un centenar de habitantes. Muy popular los fines de semana, este oasis es considerado un destino de fiesta.
Un paseo marítimo de madera permite recorrer la laguna y ofrece vistas magníficas de sus aguas color esmeralda. Este lago se formó por el simple afloramiento de agua subterránea, un marcado contraste con la aridez del desierto. Rodeado de una exuberante vegetación de palmeras, eucaliptos y huarangos, el oasis es el corazón de una leyenda cautivadora: se dice que la laguna nació de las lágrimas de una princesa inca transformada en sirena, quien aún ronda sus aguas, buscando atrapar a los extraños y ahogarlos en el fondo.
Pero el principal atractivo de Huacachina es el vasto desierto que la rodea, donde se pueden disfrutar dos experiencias extraordinarias. Huacachina es el punto de partida de los tours en buggy, vehículos todoterreno diseñados para descender a toda velocidad por las dunas... ¡Casi te sentirás como en el planeta Tatooine de Star Wars!
Luego llega la experiencia del sandboarding: equipado con tu tabla, te deslizas a toda velocidad por las gigantescas pendientes, ¡cruzando la arena como Luke Skywalker! Las excursiones suelen durar dos horas y son muy económicas (alrededor de 60 soles o 15 euros) y a menudo se programan para el final de la tarde para presenciar una mágica puesta de sol sobre las infinitas dunas.
¿Cuándo es el mejor momento para descubrir este paraíso peruano? Cualquier época del año, ya que las temperaturas son agradables casi siempre. Además, es fácil llegar: Huacachina se encuentra cerca de Ica, a 300 kilómetros de Lima, la capital de Perú, a donde llegan los turistas a través de su aeropuerto internacional. Desde Lima se puede llegar a Ica en autobús (el trayecto dura unas 5 horas y cuesta alrededor de 12 €), mediante excursiones organizadas o en vehículo privado. ¡La aventura te espera en el corazón del desierto peruano!
L'Internaute




