Medjugorje entre la investigación y el testimonio

"A mí también me cambió la vida". Ante los hechos, la razón se doblega. O al menos, se cuestiona a sí misma. Con este espíritu nació el nuevo libro de Riccardo Caniato, periodista entre los estudiosos más prestigiosos y apasionados del fenómeno de las apariciones marianas. "Medjugorje. Una investigación", publicado por Il Timone, es mucho más que una simple reconstrucción cronológica de los acontecimientos religiosos que comenzaron el 25 de junio de 1981 en un remoto pueblo de Herzegovina: es, como su título indica, una investigación, pero también una confesión. El viaje íntimo y sincero de un hombre que encontró, en esas colinas donde "el cielo toca la tierra", el sentido último de su fe.

El valor del libro de Caniato reside en su doble naturaleza: es a la vez riguroso y espiritual, documentado y vibrante. Equilibrando la profesión de periodista y la humildad del creyente, el autor presenta al lector más de cuarenta años de apariciones marianas, creando un diálogo entre fuentes eclesiásticas, testimonios directos, episodios históricos y trayectorias vitales transformadas por esa experiencia.

Esta no es una apología acrítica ni un tratado teológico. Como el propio Caniato declara con una honestidad desarmante, no es ni historiador ni teólogo. Sin embargo, como recuerda el padre Serafino Tognetti en el prefacio, «teólogo es quien reza». Y Caniato, hombre de oración, se revela también como un hombre de profunda intuición espiritual, capaz de interpretar los signos de los tiempos sin forzar jamás la interpretación.

«El fenómeno de Medjugorje genera conversión y un retorno a Dios», escribe Tognetti. Y esta frase resume toda la estructura del libro. Para Caniato, la aparición mariana no es un hecho que se pueda analizar con el bisturí de la duda, sino un encuentro. En este sentido, el libro se convierte en un testimonio, más que en un análisis: relata con precisión, pero también con emoción, los frutos espirituales de ese encuentro, tanto en la vida del autor como en las historias de numerosos peregrinos, videntes, sacerdotes y laicos.

El testimonio personal del Padre Tognetti, incluido en el volumen como una larga introducción, enriquece aún más la obra. Es una historia de conversión y vocación que nació en ese mismo pueblo, donde el silencio de principios de los años ochenta era más elocuente que las palabras, y donde el regreso a la misa y la confesión se convirtieron en un signo tangible de la presencia de Dios. Es conmovedor el recuerdo de la bendición impartida al padre durante una misa en Medjugorje, un momento que marcó el inicio de su camino de fe.

Esta nueva edición, revisada y ampliada respecto a la anterior ("Medjugorje - Paraíso de ida"), llega en un momento decisivo: en septiembre de 2024, la Santa Sede expresó un nihil obstat, eliminando todo obstáculo doctrinal a la fe de los peregrinos, manteniendo al mismo tiempo la prudencia necesaria sobre la posible naturaleza sobrenatural de los acontecimientos. El libro de Caniato se inscribe a la perfección en este clima eclesial de apertura y discernimiento.

También es destacable el análisis de la relación entre Medjugorje y los tres Papas que reinaron durante el período de las apariciones: San Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco, quien falleció recientemente (21 de abril de 2025). Precisamente con Francisco hemos presenciado una apertura pastoral sin precedentes, que culminó en el reconocimiento implícito del valor espiritual de Medjugorje, hoy plenamente central en el interés del mundo católico.

Riccardo Caniato no busca convencer, sino compartir. El lector, creyente o no, no puede permanecer indiferente ante la sinceridad de la narración ni la intensidad de las historias. Quienes busquen respuestas encontrarán preguntas bien planteadas; quienes busquen confirmaciones, hallarán indicios; quienes no crean, aun así, hallarán un documento humano y cultural de extraordinario valor.

El texto es fluido, escrito con una pluma lúcida, pero también con sentimiento. Se lee como una novela, se medita como un diario, se consulta como un ensayo. Y, sobre todo, se recuerda.

(por Paolo Martini)