Bari sin puntos fijos: ha llegado el momento de optar por otra revolución

Catorce jugadores cedidos. Sin embargo, el Bari casi con toda seguridad será un espectador en la primera fecha límite del mercado de fichajes de 2025. De hecho, los derechos de opción sobre los traspasos temporales que los incluyen deben ejercerse hoy mismo: una oportunidad que, al menos en teoría, debería haber preocupado mucho al club rojiblanco, dada la cantidad de jugadores potencialmente negociables para intentar evitar una nueva revolución. El año pasado se aprovechó la oportunidad para fichar a Sibilli; esta vez, salvo una ofensiva de última hora, se optará por la estrategia de esperar a ver qué pasa, quizás para reanudar las negociaciones en condiciones más convenientes que las actuales.
El potencial de Costantino Favasuli es interesante, especialmente si Fabio Caserta vuelve a jugar con una defensa de tres, con dos laterales hábiles en la doble fase. El jugador de 21 años de la Fiorentina tiene derecho a redención, con una contrarredención para el club Viola. Una posibilidad interesante para un lateral tan joven, que ya lleva dos años en la Serie B. Sin embargo, las conversaciones con los toscanos se reanudarán más adelante, posiblemente considerando una renovación de préstamo en condiciones similares. Nunzio Lella y Andrija Novakovich están en la puja por el Venezia: ambos terminan su contrato con el club véneto el 30 de junio de 2026 y podrían ser adquiridos por cifras modestas. El Bari, sin embargo, busca reducir los desembolsos estimados por las condiciones contractuales: la negociación podría ser exitosa, especialmente para la adquisición del centrocampista del Santeramo, mientras que el delantero centro estadounidense, que solo marcó tres goles, es menos convincente.
Por el momento, sin embargo, las condiciones para rescatar a Giulio Maggiore del Salernitana son decididamente onerosas, pero el destino del equipo de la Campania (en grave riesgo de descenso a la Serie C tras la derrota en la ida de los play-offs) podría cambiar radicalmente las cosas. Finalmente, Andrea Favilli, cedido por el Genoa, tiene buenas posibilidades, pero su contrato vence a finales de mes: el delantero pisano podría firmar un contrato de dos años, con la esperanza de encontrar la tan ansiada continuidad física. No hay derecho a rescate por las cesiones de Boris Radunovic del Cagliari, Valerio Mantovani del Ascoli y Nicholas Bonfanti del Pisa, pero no es seguro que su aventura en el Bari esté a punto de terminar. Para retener al portero serbio, sin embargo, se necesitaría un esfuerzo económico considerable, así como la garantía de un programa realmente ambicioso; de lo contrario, el portero estará destinado a otros destinos. En el caso de Mantovani, se negociará con el Ascoli, pero solo bajo condiciones realmente convenientes: no se prevén imprevistos. Finalmente, Bonfanti podría regresar cedido: a pesar de haber marcado solo dos goles, la impresión es que el potencial del delantero de 23 años no se ha aprovechado al máximo.
Se esperaba que Kevin Lasagna tuviera una obligación de compra en caso de ascenso a la Serie A: el Verona, que tiene su contrato, estaría muy abierto a negociar su regreso a Apulia, pero la operación es realmente demasiado cara (el delantero de 32 años gana alrededor de un millón solo en salario) en comparación con un rendimiento de tan solo siete goles. También se esperaba un derecho de rescate para Cesar Falletti, pero el mediapunta uruguayo fue la otra gran decepción de la temporada que terminó hace más de un mes: pocos destellos, muchas interrupciones, y está destinado a regresar al Cremonese. Una situación similar afecta a Lorenco Simic, quien llegó cedido del Maccabi Haifa y quien se habría convertido en una obligación de compra bajo ciertas condiciones que no se han cumplido: el defensa croata ha tenido varios impedimentos físicos y no ha encontrado la continuidad adecuada, por lo que su aventura con los Galletti también puede darse por concluida. Finalmente, los dos jugadores cedidos por el Nápoles: el centrocampista Coli Saco ha demostrado ser una estrella emergente, ha acumulado varios partidos y buscará un puesto que le garantice un uso más continuo. El club de Apulia, por otro lado, recibiría con los brazos abiertos al defensa Nosa Obaretin, quien, sin embargo, ha terminado en la mira del Cremonese y el Lugano suizo: actualmente, su regreso parece muy complicado.
Por el momento, solo el equipo belga Dender ha ejercido la opción de fichar al delantero Aurelian Scheidler. El resto, un pequeño grupo regresará a Bari, a la espera de conocer su futuro. Ismael Achik no convenció en Ascoli y tampoco fue titular en Cerignola: es improbable que esté listo para el impacto con el B. Filippo Faggi tuvo más espacio en Gubbio, pero incluso en su caso, la liga cadete parece un paso demasiado grande. Karlo Lulic fue valorado en Sarajevo, pero no redimido: no se descarta que se reabra una negociación con el equipo serbio, justo cuando Andrea D'Errico busca un puesto fijo, tras regresar de la aventura en Dubái con un año más de contrato.
El futuro de los mediapuntas Giuseppe Sibilli y Giacomo Manzari aún está por verse. El primero depende de la permanencia de la Sampdoria: si los ligures logran su permanencia en la Serie B, podrían evaluar su rescate, pero no con las cifras impuestas en la opción actual (900 mil euros). El bariense, por otro lado, lo daría todo por tener otra oportunidad en su ciudad, tras un torneo en el que no convenció ni con el rojiblanco ni en su etapa en el Carrarese. La experiencia de Emmanuele Matino en el Cittadella también es dispar: es improbable que regrese al nuevo proyecto. Finalmente, los jóvenes que regresarán a la base son Acerbi: el portero Luigi Pellegrini del Fidelis Andria, el defensa Raffaele Natuzzi del Brindisi, Francesco Lops y Davide Colangiuli del Sorrento, Moussa Mane y Vincenzo Onofrietti del Team Altamura, Hemsley Akpa-Chkwu del Novara.
La Gazzetta del Mezzogiorno