La localidad de Zamora con restos de muralla, una bonita plaza mayor y muchas iglesias históricas

En la provincia de Zamora se ubica Villalpando, un municipio bañado por los ríos Valderaduey y Alteraduey, donde celtas, romanos, godos y árabes habitaron siglos atrás. Su importante papel histórico hace que cuente con un rico patrimonio.

Los primeros habitantes de Villalpando fue el pueblo celta, tal y como atestiguan los vestigios encontrados, como utensilios de cerámica negra al torno y astas de ciervo pulidas. Durante esa época se amuralló, llegando a contar con hasta cuatro puertas de entrada, con el objetivo de evitar el paso de los romanos. Posteriormente, durante la Edad Media fue destruida para luego levantarse en una nueva población bajo el nombre de Alpando.
Tiempo después llegaron los templarios, una orden religiosa y militar cuyo fin era proteger a los campesinos que se dirigían a Jerusalén. Desde ese momento la villa empezó a ser habitada por familias destacadas y se convirtió en la cuna de la Inmaculada Concepción. En el siglo XIX los ejércitos de Napoleón llegaron y a partir de ahí empezaron a desarrollarse grandes mejoras en la ciudad (alumbrado público, serenos, un nuevo ayuntamiento...).

Pasear por las calles de Villalpando es una oportunidad perfecta para descubrir los restos de las murallas y otras fortificaciones que dejan ver su destacado papel en la historia. En la actualidad se conservan dos de sus puertas, el Castillo de los Velasco y el Palacio de los Condestables.
El Arco de Santiago, edificado en el siglo XII, está dotado a ambos lados de dos torreones de defensa. Por otro lado, la Plaza Mayor es un lugar ideal para disfrutar de una buena comida o un café, ya que está rodeada de restaurantes y cafeterías que te ofrecen una bonita vista del lugar.

También destacan varias construcciones religiosas como la iglesia de Santa María la Antigua, considerado uno de los monumentos más destacados dentro del arte románico español. Las naves del templo son originarias del siglo XII, y aunque en la actualidad parte de ellas se han derrumbado, se conserva la cabecera en muy buen estado.
Otro imprescindible es la iglesia de San Pedro, destacada por su capilla de los Castañones con tres monumentos sepulcrales, un cristo gótico y un retablo barroco. Además, desde allí se puede admirar el exterior de la de San Nicolás del siglo XIII. A las afueras de Villalpando se encuentra la iglesia de San Lorenzo del siglo XIII, de la cual se conserva su torre principal actualmente. Otros lugares de interés para visitar son el hospital del Espíritu Santo y el convento de San Antonio de Padua.
20minutos