La obra El último tren es una travesía que va de la desolación a la esperanza

La obra El último tren es una travesía que va de la desolación a la esperanza
La puesta del escritor estadunidense Cormac McCarthy empieza temporada hoy en el Cenart
▲ El actor Carlos Álvarez (izquierda) es Blanco, el profesor universitario, y Marco Antonio García, Negro, un ex convicto que encontró la fe.Foto Cristina Rodríguez
Alondra Flores Soto
Periódico La JornadaSábado 7 de junio de 2025, p. 5
Una mirada entre la desolación y la esperanza se lleva a escena en un esgrima actoral en El último tren, pieza dramatúrgica en la que el escritor estadunidense Corman McCarthy hace la gran pregunta sobre el sentido de la existencia.
Cada postura tiene algo de verdad, tanto la desolación de ver el mundo como un campo de trabajos forzados donde todos somos presos y al azar somos llevados a la ejecución. Y también la otra, de que claro que existe algo mejor, si trabajamos en ello. Queremos que el público oscile entre blanco y negro en esta zona de grises
, declaró el director Luis Ángel Gómez durante una conferencia sobre la obra que hoy inicia temporada en el Centro Nacional de las Artes (Cenart).
Una plataforma del Metro detona la historia, donde antes se conocieron los dos personajes de la obra. No tenías que ser un héroe
, reprocha uno, pues fue detenido antes de aventarse a las vías.
Dos personajes, identificados en el libreto como Blanco y Negro, desarrollan un intenso diálogo donde confrontan sus ideas filosóficas y espirituales. El duelo de visiones de vida ocurre mientras están encerrados en un pequeño departamento.
El director escénico consideró que es valioso identificar por qué algunas personas tienen desolación, sin negar ese sentir que se tiene de vacío y la realidad les duele, que se despiertan cada día con dolor y desazón cotidianos. Algunos encuentran redención, pero a otros no les funciona, esa sería la búsqueda, dar legitimidad a ambas posturas, pues ninguna es verdad absoluta
.
Marco Antonio García, uno de los actores en escena, afirmó que nos ha tocado un tiempo donde parece que hay un sistema que está asesinando el futuro
. Ver el genocidio en Gaza o la crisis humanitaria nos hace sentir cómplices, mencionó. Desde el teatro se apela a buscar un sentido que pueda orientar nuestras acciones y pensarnos como humanidad.
Por su parte, Carlos Álvarez, opinó que aunque parezca un panorama desolador, siempre hay que luchar, no sabemos por qué ni para qué estamos aquí. Hay que respetar las creencias y el sentir de todos
. También intentar no cerrar los ojos a lo que está sucediendo en el mundo, en una época de guerras absurdas.
La pieza teatral, la segunda escrita por McCarthy, se estrenó en 2006. El autor, quien nació en Rhode Island en 1933, es más famoso por las novelas No es país para viejos; Todos los hermosos caballos, reconocida con el Premio Nacional del Libro, y La carretera, por la que recibió el Pulitzer.
McCarthy fue un hombre muy inteligente, murió en 2023. Sabía que presentaba a la humanidad, por lo menos a Occidente, en inadecuación tanto con la naturaleza como con lo que hemos construido como cultura
, opinó el actor Marco Antonio García. Por eso esta expresión entre la fe y la razón
.
El título original de la pieza teatral es Sunset Limited, nombre de uno de los trenes más antiguos y largos de Estados Unidos, el cual hace un recorrido de Nueva Orleans a Los Ángeles. El director de la obra, la cual fue traducida por Gerardo Capetillo, relató que el trabajo de adaptación al contexto mexicano fue un poco complicado porque el autor trabaja mucho a partir de varios referentes de la cultura estadunidense.
La metáfora de la obra es un tren que sí existe; si bien no pasa por las grandes ciudades de Estados Unidos, como Nueva York, si lo hace por zonas cercanas a la frontera. Es un viaje hacia las tierras fértiles y de riqueza de California. Es un viaje hacia un futuro promisorio que en la cultura estadunidense es contundente y claro.
En el contexto mexicano, se dio énfasis a la metáfora de que somos pasajeros en el tren de la vida, y hay quienes ya se quieren bajar, mientras otros encuentran sentido a partir de voltear a ver a sus compañeros de viaje. El lenguaje es claro: es el último tren que vas a poder ver, pero en el caso de Blanco también es lo que le impide llegar a la paz, a la soledad, a todo lo que ansía
.
Después de presentarse en 2024, el montaje se vuelve a escenificar con un nuevo elenco integrado por Carlos Álvarez, en el papel de Blanco, profesor universitario, y Marco Antonio García como Negro, ex convicto que encontró la fe. Este último comentó que la actuación es de tipo realista, y hay algunos elementos escenográficos y de iluminación que están desde una perspectiva simbólica, así que hay un juego entre estos dos planos.
La obra El último tren comienza temporada hoy y concluye el 12 de julio (excepto el domingo 15), con funciones de jueves a sábados a las 19 horas y los domingos a las 18 horas, en el Foro de las Artes del Cenart, en Río Churubusco 79, colonia Country Club.
Vértigo, unión de acrobacia y danza

▲Foto Afp
Periódico La JornadaSábado 7 de junio de 2025, p. 5
El coreógrafo franco-argelino de danza contemporánea Rachid Ouramdane combina acrobacia, música y arquitectura en el espectáculo Vértigo. Suspendidos en el aire o encaramados en los balcones, los acróbatas del Chaillot Teatro Nacional de la Danza crean una atmósfera vertiginosa en una inmersión sensorial, guiados por el sueño de superar sus límites, siguiendo el ritmo marcado por Ouramdane en el Grand Palais de París.
jornada