Tom Hardy admite el costo de su carrera: 'Mi cuerpo se cae a pedazos y no va a mejorar'


Tom Hardy revela las secuelas físicas de su carrera en el cine de acción
Instagram de Tom Hardy
El paso del tiempo y la exigencia física han dejado su huella en Tom Hardy, una de las figuras más reconocidas del cine de acción contemporáneo. A los 47 años, el actor británico admite abiertamente que los años de interpretaciones arriesgadas y entregadas a escenas de alto impacto han pasado factura a su cuerpo, y que el desgaste es cada vez más evidente.
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A lo largo de su carrera, Hardy se ha forjado una reputación como intérprete comprometido, dispuesto a someterse a extensos entrenamientos físicos y a realizar escenas con altos niveles de exigencia. La potencia y credibilidad de personajes como Bane en The Dark Knight Rises o Max Rockatansky en Mad Max: Fury Road están directamente ligadas a su entrega en el plató y su insistencia en asumir riesgos y secuencias complejas. No es casualidad que Hardy se haya convertido en sinónimo de intensidad y dinamismo, características que exigen un sacrificio físico considerable.
En una reciente entrevista con Esquire, el propio actor compartió sus reflexiones sobre estas demandas continuas y su impacto acumulativo. “Hacer malabares con motosierras; subirme a un monociclo y tirarme de todo—intentaba esforzarme al máximo”, contó Hardy respecto a algunas escenas memorables. Sin embargo, tras décadas de esfuerzo físico, reconoce que el cuerpo empieza a mostrar señales de desgaste severo.
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El actor reconoce que el cuerpo empieza a mostrar señales de desgaste severo.
Instagram de Tom Hardy
El deterioro provocado por la intensidad de sus papeles no es solo una sensación abstracta, sino que está respaldado por un historial médico que asombraría incluso a los deportistas profesionales. Hardy reveló que ha pasado por dos operaciones de rodilla, tiene una hernia discal en la espalda y también padece ciática, a lo que se suma un diagnóstico de fascitis plantar y problemas en el tendón de la cadera. “¿De dónde viene eso? ¿Por qué? ¿Por qué?”, se pregunta, casi con resignación, al describir cómo el cúmulo de lesiones parece generalizarse por todo su organismo. “Es como si todo mi cuerpo se estuviera cayendo a pedazos ahora, y no va a mejorar”, concluye.
Esta sinceridad sobre los costos de la profesión contrasta fuertemente con la imagen glamorosa que a menudo proyecta Hollywood. Hardy pone sobre la mesa un problema habitual entre los actores del género, que muchas veces arrastran secuelas de rodajes frenéticos y reiteradas acrobacias sin contar con largos periodos de recuperación. El propio intérprete, lejos de dramatizar, lo expresa con realismo y algo de humor negro, aceptando que la reversibilidad de estas lesiones parece improbable.
A pesar de las secuelas físicas, Hardy continúa participando en producciones de gran exigencia. Actualmente protagoniza junto con Pierce Brosnan y Helen Mirren la serie MobLand, mientras que su más reciente incursión en el cine de acción, Havoc, se estrenó en Netflix en abril.El actor demuestra no tener intención de reducir el ritmo profesional. Esta resistencia resalta un rasgo esencial de su personalidad: la determinación por mantenerse activo y desafiante, aun cuando las condiciones físicas ya no sean las mismas que en sus años de juventud. Hardy continúa aceptando trabajos que requieren energía, compromiso físico y, en muchos casos, esa cuota de riesgo que lo ha hecho célebre.
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Hardy continúa participando en producciones de gran exigencia.
Instagram de Tom Hardy
Uno de los papeles más recientes y reconocibles de Hardy ha sido Eddie Brock, alter ego de Venom. Sobre este personaje, el actor ha compartido detalles y reflexiones sobre el final de una etapa profesional. Según Hardy y la directora Kelly Marcel, siempre tuvieron claro que la saga terminaría como trilogía, con Venom: El último baile marcando su cierre. “Sabíamos que serían tres. Sabíamos que terminaría así desde el principio”, explicó Marcel.
Pese a este cierre, Hardy no esconde que le hubiera atraído la posibilidad de un crossover: su Venom enfrentándose al Spider-Man interpretado por Tom Holland. “Eso está mucho más allá de mi control. Y me encantaría hacerlo, pero eso ni siquiera es una conversación para tener a mi nivel, de sólo ser un actor en ese mundo”, reconoció.
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