Alcaldes del PSPV temen el efecto contagio en sus objetivos electorales

El PSPV contiene la respiración. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantiene su firme intención de continuar hasta 2027 -“no podemos romper la estabilidad del Gobierno para ponernos en manos de la peor oposición” o “no podemos destruir todo lo logrado”- y no piensa disolver las Cortes Generales y adelantar las elecciones generales. Una hoja de ruta cuyos efectos electorales son todavía una incógnita que empieza a inquietar a todos aquellos cargos de la marca del puño y la rosa que tienen intención de presentarse de nuevo a las urnas en 2027.
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Ayer por la mañana, La Vanguardia consultaba a varios alcaldes que mostraban su rechazo a que las generales y municipales coincidieran en una única convocatoria. El contenido de las conversaciones entre Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García que se han ido desgranando durante estos días han puesto de manifiesto que la preocupación de las primeras horas de muchos cargos socialistas era fundada. Sin embargo, en una federación tan sanchista como la valenciana, los ediles preferían no dar su nombre al salirse del guion aunque admitían que no les haría ninguna gracia que se votara a la vez su Ayuntamiento y la Presidencia del Gobierno. “Si los alcaldes vamos solos, mejor”, expresaba uno de los alcaldes más representativos de la provincia de Valencia preocupado por los efectos de un posible superdomingo.
Ayer, ante los medios de comunicación, Pedro Sánchez descartaba esta posibilidad en la rueda de prensa posterior a la larga ejecutiva federal. “No va a haber un superdomingo electoral. Nunca lo ha habido desde que yo soy presidente del Gobierno. Por tanto, no tiene que haber duda en eso. Yo soy muy respetuoso con los ámbitos de elección”, señaló en su comparecencia.
Diputados autonómicos también creen que sería un “desastre” si no hay un adelanto electoralUna respuesta que permite coger aire tanto a los alcaldes como a los diputados autonómicos que temían “un desastre” de coincidir varias elecciones juntas. En el caso valenciano, unir las elecciones autonómicas con las generales dificultaría mucho a la izquierda poner el foco de los comicios en la gestión del gobierno de Carlos Mazón por la dana. Un parlamentario socialista apuntaba ayer que una coincidencia en fechas pondría en un brete a su formación y daría aire a PP y Compromís. Tampoco parece que Vox saldría mal parado.
El problema es que el calendario si Sánchez mantiene los tiempos electorales es que todas las convocatorias, aunque no coincidan, estarán muy cercanas en el tiempo. Hay que recordar que el presidente del Gobierno adelantó las generales a julio de 2023 nada más conocer el mal resultado de las autonómicas de mayo de ese mismo año. Por ello, el efecto contagio no sería descartable pese a que la fecha, como dijo ayer Pedro Sánchez, no fuera exactamente la misma.
Así las cosas, no todos se muestran excesivamente preocupados. Uno de los alcaldes consultados llama a la prudencia y señala que las decisiones no se están tomando en clave electoral sino como respuesta a lo que se ha conocido. Confía en que las revelaciones del informe de la UCO sean “algo puntual” pues de lo contrario, admite, “habría que hacer borrón y cuenta nueva y presentar un nuevo proyecto electoral con nuevas caras”.
Dirigentes locales dudan de que el Gobierno pueda aguantar y agotar la legislaturaSin embargo, muchos de los ediles consultados ven complicado que el presidente, pese a sus intenciones, “pueda aguantar dos años” con esta presión. “No creo que pueda”, añadía otro testimonio. Y es que hay mucho temor por lo que pueda salir en las próximas semanas.
Con todo, hasta el momento, de forma pública, en el PSPV mantienen el discurso oficial de apoyo tanto a su secretaria general, Diana Morant, como al presidente Sánchez.
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En esta línea, una de las pocas ventajas para el partido que puede tener el hecho de que se alargue la legislatura es que tanto la ministra de Ciencia y Universidades, Diana Morant, como la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, podrán seguir en su cargo hasta la convocatoria de las autonómicas. Su cargo depende directamente del Ejecutivo y si hubiese un adelanto electoral y una presumible derrota, ambas dejarían de tener un altavoz público para hacer oposición al PP de Carlos Mazón.
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