Análisis de los Sony WH-1000XM6: en el punto de mira del sonido

En términos de diseño, las diferencias en comparación con la generación anterior son sutiles, y al ser unos auriculares de alta gama, se esperaría una construcción premium, pero los XM6 se quedan cortos en ese aspecto. El plástico domina prácticamente todos los componentes. Aunque parece robusto y duradero, no transmite la sensación de lujo asociada a un producto de este segmento. Por otra parte, esta elección contribuye a un peso reducido, que hace que el XM6 sea ligero y cómodo, incluso en sesiones de uso prolongadas. El diseño se mantiene prácticamente sin cambios respecto a la generación anterior, y Sony podría haber aprovechado esta actualización para introducir mejoras.
Las almohadillas, tanto en el borde como en las orejas, podrían ser más voluminosas, lo que aumentaría la comodidad general. El ajuste del tamaño de las varillas no es muy fluido y, con los auriculares puestos en la cabeza, se hace difícil conseguir con precisión el ajuste ideal. También cabe destacar el estuche de transporte: es compacto y fácil de llevar a cualquier parte. A diferencia del modelo anterior, que utilizaba un cierre tradicional, esta nueva versión utiliza una tira magnética que hace que el proceso de apertura y cierre sea más rápido y práctico.
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