Djokovic vence a Norrie y alcanza la final en Ginebra ante el rival de João Fonseca en Roland Garros

A sus 38 años, Novak Djokovic está a una victoria de alcanzar el hito del centenar de títulos en el circuito profesional. Este viernes, el serbio confirmó su favoritismo ante el británico Cameron Norrie y avanzó a la final del ATP 250 de Ginebra al ganar 2 sets a 1, con parciales de 6/4, 6/7 (8/6) y 6/1, en 2h14 de partido.

Esta será la segunda final de la temporada para Djokovic; la primera fue en el Masters 1000 de Miami, cuando fue derrotado por Jakub Mensik. El rival ahora será el polaco Hubert Hurkacz, 31º del ranking, que eliminó a Sebastian Ofner en la otra semifinal. Curiosamente, Hurkacz también será el rival del joven brasileño João Fonseca en su debut en Roland Garros, a principios de la próxima semana.

Con esta victoria, Djokovic mantuvo su racha ante Norrie: cinco triunfos en cinco enfrentamientos en el circuito. Actualmente número 6 del mundo, el serbio busca el trofeo número 100 de su carrera en su final número 144. Sólo Jimmy Connors (109) y Roger Federer (103) han alcanzado o superado esa marca hasta la fecha.

Con seis aces y sólo dos errores no forzados, Djokovic estuvo prácticamente impecable en su saque: perdió sólo dos puntos en sus juegos de servicio durante todo el primer set. El partido comenzó igualado, con ambos jugadores sacando bien y confirmando con facilidad. La excepción llegó en el séptimo juego, cuando Djokovic aumentó la intensidad en sus restos, presionó al británico y consiguió el único quiebre del set.

El nivel técnico fue alto. Norrie también tuvo buenos momentos, con nueve ganadores, pero el equilibrio lo rompió la consistencia de Djokovic, que supo explotar los momentos justos para tomar el control y cerrar 6/4. El quinto juego fue el más disputado del set, con largos intercambios y variación táctica por parte de ambos lados, pero, más allá de eso, los sacadores dominaron la acción.

El segundo set fue muy diferente al primero. Norrie empezó a tomar el control del partido e impuso su ritmo en los primeros juegos. Con un quiebre en el cuarto juego y confirmando el saque en la secuencia, el jugador británico abrió con 4/1, sacando a Djokovic de la comodidad que había mostrado hasta entonces. El número 6 del mundo empezó a mostrar impaciencia, con gestos de frustración y alguna que otra queja sobre sus propios errores.

Aún así, los serbios no se rindieron fácilmente. Intentó jugadas más atrevidas, apostó por subir a la red y, incluso bajo presión, utilizó toda su experiencia para equilibrar el set. Consiguió recuperar el break y llevar el set al tiebreak. Djokovic tuvo la oportunidad de cerrar el partido con 6/5, pero Norrie reaccionó con valentía y ganó el partido 8/6, forzando el tercer set. El equilibrio también se reflejó en las estadísticas: Djoko terminó el set con 16 bolas ganadoras contra 13 de su oponente.

La decisión, sin embargo, tuvo un único dueño. Djokovic volvió aún más agresivo y aprovechó el cansancio físico y emocional de Norrie para controlar por completo el set. Con dos quiebres y sin ofrecer ninguna opción con su saque, el serbio aplastó a su rival con un contundente 6/1, confirmando la victoria y el pase a la final de Ginebra.