Tribunal estadounidense ordena mantenimiento del suministro de combustible a Azul

El Departamento de Justicia de Estados Unidos emitió este lunes 24 una orden para mantener el suministro de combustible por parte de Raízen a Azul , luego de que la aerolínea solicitara el domingo impedir que Raízen suspendiera el suministro de combustible, según un documento judicial.
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En carta fechada el 18 de junio, Raízen, uno de los mayores distribuidores de combustible de aviación de Brasil, informó a Azul que el fiduciario de la 12ª emisión de debentures de la aerolínea, Vórtx, había comunicado que la compañía se encontraba en mora en el pago de la amortización y remuneración del bono desde el 12 de junio.
“Por lo anterior, Raízen… solicita a Azul un pronunciamiento urgente sobre cualquier posible resolución del impago y de manera oportuna para evitar la suspensión del suministro, dado el plazo de tres días hábiles que tiene Raízen para implementar el mecanismo de ‘Stop Supply’”, indicó la distribuidora de combustibles en la correspondencia adjunta por Azul y entregada a los tribunales estadounidenses, donde está en curso su recuperación judicial.
Azul había afirmado en su solicitud a la corte estadounidense que la acción de Vórtx era “ilegal” y que la interrupción en el suministro de combustible, de llevarse a cabo, “pone en riesgo la capacidad de Azul de reorganizarse exitosamente bajo la recuperación judicial”.
“La actuación del agente fiduciario representa una violación a los términos de la recuperación judicial”, dijo Azul.
En la decisión del lunes, el tribunal estadounidense aceptó la solicitud de Azul, impidiendo que Raízen interrumpa el suministro de combustible sin presentar primero una solicitud al tribunal.
Al ser contactados, Vórtx afirmó que no hace declaraciones fuera de los anuncios oficiales al mercado, mientras que Raízen dijo que no hará ninguna declaración.
Según el texto de la petición ante la Corte estadounidense, Azul afirma que Raízen, una empresa conjunta entre Shell y el grupo Cosan, es responsable de alrededor del 68% de las necesidades de combustible de la aerolínea en rutas nacionales y su infraestructura “está repartida en decenas de aeropuertos donde no hay alternativas viables”.
La aerolínea afirma además en el documento que incluso una breve interrupción en el suministro causaría una “cascada de eventos de vuelos cancelados, aviones en tierra y daños irreparables a la reputación”.
Las acciones de Azul cerraron el lunes con caída del 4,08%, cotizadas a R$ 0,94, mientras que el Ibovespa cerró con baja del 0,41%.
IstoÉ