Una primicia tras el derrocamiento del régimen de Assad en Siria

El espectáculo de dos artistas sirios en el Teatro Hamra, cerrado desde hace tiempo y conocido popularmente como "teatro popular sirio", fue considerado un símbolo de renacimiento cultural.

La obra, presentada bajo el título "Teatro Nacional", abordó los acontecimientos políticos y los problemas sociales del país. Según informes, el espectáculo recibió comentarios positivos del público por sus escenas que abordan realidades sociales.

Ahed Dib, actriz del Teatro Árabe Sirio, enfatizó a la Agencia Anadolu que el país ha estado históricamente vinculado a las artes. "Ya sea político o social, el teatro siempre es un reflejo de la sociedad", dijo. "Esta obra es una de las primeras en convertirse en la voz del pueblo tras la caída del régimen de Asad. Esperamos que nuestros mensajes tengan una resonancia aún mayor a través del teatro de ahora en adelante".

Dib, al afirmar que el teatro es una forma de arte que establece un contacto directo con la sociedad, dijo: «El teatro es la base de las artes, la brújula que nos guía. Si el teatro es bueno en un país, las demás artes también lo son».

Raed Mushrif, director de la obra, declaró que el guion fue escrito por Cevan Can y que Oadi Brad interpretó el papel principal. Mushrif destacó la escasez de teatros en Damasco, diciendo:

Solo dos teatros están activos en Damasco. También deberían activarse los escenarios de los centros culturales afiliados a los Ministerios de Cultura y Educación. El teatro es el pan de la vida. La gente ama esta forma de arte y la acoge con entusiasmo», afirmó.

Mushrif afirmó que la obra, que trata temas familiares, ofrece fuertes reflexiones sobre la vida cotidiana de los espectadores y que el teatro necesita reconectarse con la sociedad.

Said Davass, uno de los asistentes a la función, opinó que el teatro podría transmitir mensajes políticos más explícitos en el futuro. Dijo : «Estamos en una etapa incipiente. Con el tiempo, equilibraremos la balanza y nos presentaremos en el escenario con críticas más contundentes. Tenemos grandes esperanzas y somos muy optimistas sobre el futuro».

Esta primera obra representada en el Teatro Hamra trajo esperanza de que el arte del teatro pudiera revivir en Siria.

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