‘Los seres humanos hoy infligen más sufrimiento a los animales que en 1975’

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‘Los seres humanos hoy infligen más sufrimiento a los animales que en 1975’

‘Los seres humanos hoy infligen más sufrimiento a los animales que en 1975’
Hace cincuenta años se publicó mi libro Liberación animal, al que se le atribuyó el mérito de desencadenar el movimiento moderno de defensa de los derechos de los animales. La publicación contiene argumentos éticos y descripciones objetivas de lo que les hacemos a los animales.

Peter Singer Foto:Peter Singer

Los argumentos éticos han resistido bien durante estos 50 años de debate. Muchos filósofos apoyan perspectivas similares, incluidos los que tienen puntos de vista muy diferentes a mi posición utilitarista. Por otro lado, las descripciones fácticas sobre lo que les hacemos a los animales dentro del libro dejaron de reflejar con precisión las condiciones actuales. Así que hice una revisión y actualización completa del libro, que quedó consignado en Liberación animal ahora.
Mucha gente se preocupa por la crueldad hacia los animales, pero se centra en los de compañía, especialmente en perros y gatos. Para el 2018, las mascotas sumaban unos 840 millones en todo el mundo. Esta cifra es pequeña frente a los aproximadamente 200.000 millones de animales vertebrados para la alimentación, criados en condiciones espantosas en granjas industriales.
De los animales vertebrados criados para la alimentación en confinamiento, unos 124.000 millones son peces. En la actualidad contamos con investigaciones fehacientes de que los peces pueden sentir dolor, y no hay justificación para ignorar ese dolor.
Además, de los 124.000 millones de peces, se calcula que cada año se extraen del océano entre 460.000 millones y 1,1 billones de peces, que se trituran en harina de pescado y se utilizan como alimento para peces carnívoros. Un salmón de piscifactoría come 147 peces antes de ser sacrificado.
Después de los peces, los pollos son los vertebrados más consumidos: cada año se crían y matan unos 70.000 millones, normalmente en galpones, donde habitan unas 20.000 aves. Actualmente, los pollos se crían para que crezcan tan rápido que sus huesos inmaduros de las patas no pueden soportar fácilmente su peso, lo que les provoca dolores crónicos durante la última quinta parte de su vida.
Por este motivo, John Webster, profesor emérito de la U. de Bristol, veterinario y experto en el bienestar de los animales de granja, ha descrito la producción intensiva de pollos moderna como “el ejemplo más grave y sistemático de la inhumanidad del hombre hacia otro animal sintiente”.
Debido al crecimiento de la producción animal, los humanos infligen más sufrimiento a los animales hoy que en 1975. Sin embargo, la tendencia desde 1975 no es del todo negativa. La idea de que los animales deben tener derechos ha pasado de ser ridiculizada a estar ampliamente extendida. En muchos países, salvaguardar el bienestar de los animales se considera una responsabilidad estatal.
En Europa, las reformas han reducido el sufrimiento de cientos de millones de animales criados para la alimentación o utilizados en investigación. Por ejemplo, es ilegal mantener a las gallinas ponedoras de huevos en las jaulas estándar de alambre, porque les obstaculiza desplegar completamente las alas o poner los huevos en el nido. También está prohibido mantener a los cerdos de cría y a los terneros en jaulas individuales que les impiden darse la vuelta o moverse más de un paso.
Lamentablemente, el resto del mundo está a la zaga de Europa en este aspecto. Eso incluye a EE. UU., donde, a falta de una legislación federal que regule cómo pueden criarse los animales de granja, miles de millones siguen viviendo en condiciones que no han mejorado en los últimos 50 años.
China es ahora el primer productor mundial de cerdos y un enorme productor de pollos. Para aumentar la producción, el país está construyendo enormes ‘granjas’ en forma de rascacielos para criar cerdos en estrecho confinamiento.
Gandhi dijo que “la grandeza de una nación y su progreso moral pueden juzgarse por la forma en que se trata a sus animales”. Según ese criterio, aún no existen naciones verdaderamente grandes o moralmente progresistas.
Peter Singer, filósofo, autor, profesor emérito de Bioética. © Project Syndicate, Melbourne.
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