Muere a los 88 años Eddie Palmieri, legendario pianista y compositor que revolucionó la salsa
Eddie Palmieri, quien revolucionó la música latina y contribuyó enormemente a la explosión de la salsa en Nueva York, ha fallecido este miércoles a los 88 años en Estados Unidos. «El legendario pianista, compositor, líder de banda, y una de las figuras más influyentes de la historia de la música latina falleció en su casa en Nueva Jersey el 6 de agosto», publicó su familia en su cuenta de Instagram junto a una foto del artista.
Fania Records, el emblemático sello de la salsa, lamentó la muerte del astro, a quien calificó de «uno de los más innovadores y únicos artistas en la historia de la música». «Lo extrañaremos mucho», añadió. Hijo de puertorriqueños, Palmieri nació en Nueva York, en el barrio de Harlem. Hermano del pianista Charlie Palmieri, entró en la escena desde muy pequeño. Tomó clases de piano en su adolescencia en el Carnegie Hall, que alternó con el aprendizaje de los timbales.
Comenzó a tocar profesionalmente en bandas antes de cumplir la mayoría de la edad, saboreando la escena musical de Nueva York, incluyendo un período de dos años junto al músico puertorriqueño Tito Rodríguez. En 1961 fundó la banda La Perfecta, que redefinió la salsa con el uso de trombones en vez de trompetas. Cuatro años más tarde, su 'Azúcar Pa' Ti' se convertiría en un éxito en las pistas de baile que décadas más tarde ganaría también espacio en la colección de la Biblioteca del Congreso estadounidense.
Palmieri es reconocido por haber revolucionado el sonido del jazz latino y de la salsa, y por su larga carrera que abarcó más de siete décadas. En 1975, se convirtió en el primer artista latino en alzarse con un Grammy gracias a su álbum 'The Sun of Latin Music', que triunfó en la entonces debutante categoría Mejor grabación latina.
En su vasta carrera, el músico obtuvo ocho gramófonos, el último de ellos por 'Simpático' en 2006 en el género de jazz latino, además de otros honores. Palmieri fue uno de los primeros salseros en abrazar un tono político en sus composiciones.
En 1969, lanzó al álbum 'Justicia', cuyas letras abordan la desigualdad, la justicia social y la discriminación, y contó con las voces de Ismael Quintana y Justo Betancourt. Poco después, en 1972, se presentó en Sing Sing, una prisión en Nueva York, ante un público en el que predominaban latinos y negros, de acuerdo con el diario The Washington Post.
«¡Para toda la humanidad!», gritó Palmieri a través de un altavoz en el patio de la prisión, según reseñó el periódico. Dijo además que no debería haber «muros», «miedos», «solo una cosa en la vida: libertad en los años venideros». «Fue mentor, maestro y defensor incansable de la música y la cultura latinas. Inspiró a generaciones de músicos y conmovió a innumerables oyentes con su arte, su convicción y su sonido inconfundible», destacó su cuenta. Le sobreviven cinco hijos y cuatro nietos. Su esposa, Iraida Palmieri, falleció en 2014.
ABC.es