Un grito por el Museo Cajal

Tribuna

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Placa fotográfica de 1886 con autorretratos de Santiago Ramón y Cajal.Legado Cajal-CSIC

“Se ha dicho hartas veces que el problema de España es un problema de cultura. Urge, en efecto, si queremos incorporarnos a los pueblos civilizados, cultivar intensamente los yermos de nuestra tierra y de nuestro cerebro, salvando para la prosperidad y enaltecimiento patrios todos los ríos que se pierden en el mar y todos los talentos que se pierden en la ignorancia”. Estas palabras no son solo una reflexión: son un grito por la investigación y la educación. Las pronunció don Santiago Ramón y Cajal el 1 de mayo de 1922, al jubilarse de sus cargos académicos. Su eco resuena hoy con más vigencia que nunca y nos recuerda que invertir en conocimiento no es una opción: es una necesidad vital para el futuro de nuestro país.

En febrero de 2021, el Consejo de Ministros acordó la creación de un grupo de trabajo para la proyección y difusión del legado de don Santiago Ramón y Cajal. Algunos de nosotros hemos tenido el honor de formar parte del mismo y, en paralelo, hemos impulsado numerosas exposiciones, conferencias, publicaciones, encuentros científicos y talleres de ciencia ciudadana.

En mayo de 2022 comenzó oficialmente el Año de Investigación Ramón y Cajal, declarado Acontecimiento de Excepcional Interés Público. El Gobierno encargó a la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) la realización material de los actos y actividades, así como la gestión de las donaciones incentivadas fiscalmente para su ejecución. Durante la presentación del Año Cajal, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, aseguró que “este trienio culminará con la creación de un espacio museístico del cerebro con el nombre de Santiago Ramón y Cajal que valore y proteja su obra y su pensamiento”. Por su parte, el presidente Pedro Sánchez se comprometió a “potenciar el Legado Cajal con la creación de un museo dedicado al funcionamiento del cerebro que comenzará su actividad cuando acabe este Año Cajal”.

El Legado Cajal es uno de nuestros mayores tesoros culturales. Donado por don Santiago y completado por miembros de su familia, ha estado siempre a disposición de la comunidad científica, custodiado por el Instituto Cajal. Desde 2017 forma parte de la Memoria del Mundo de la UNESCO y goza desde 2024 de la máxima protección en nuestro país con la categoría de Bien de Interés Cultural. En junio de 2024, se aprobó el Real Decreto 590/2024 para crear el Museo Cajal como Museo Nacional de titularidad estatal.

Hoy, 31 de mayo de 2025, concluye el Año Cajal. Aunque el programa oficial apenas enumera 21 actos, el entusiasmo colectivo ha propiciado centenares de actividades por toda España y en diferentes ciudades del mundo.

Pedimos que se den los pasos necesarios para que se cree lo antes posible, y respondiendo al compromiso del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, un moderno y ambicioso Museo Nacional Cajal. La revolución en neurociencias que se vislumbra hoy tiene su origen en la obra visionaria de Cajal, quien, con su microscopio y sus dibujos, ensambló el universo de conocimiento que nos permite comprender los secretos fundamentales de nuestra máquina de pensar.

Reclamar más reconocimiento a Cajal es reclamar más investigación y más progreso para nuestro país. Además, nuestro premio Nobel representa valores de esfuerzo, trabajo, perseverancia, sacrificio e independencia de juicio, muy necesarios para nuestra sociedad actual. Nuestra visión es que el Museo Nacional Cajal será el epicentro de la Red de Espacios Cajal y podría ser referencia internacional en neurociencia, inteligencia artificial y neuroderechos.

Pedimos al Gobierno de España que cumpla su compromiso haciendo realidad la creación de un Museo Nacional Cajal a la altura de la persona científicamente más brillante, socialmente más comprometida y globalmente más reconocida de nuestro país.

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