Con su victoria ante el Mors-Thy en los play-offs, el balonmano de Saint-Raphaël Var marca su regreso a Europa.

Hola Europa, hemos vuelto.
Los jugadores del emblemático equipo de balonmano Saint-Raphaël Var pueden desatar su alegría agitando con energía la pancarta proporcionada para la ocasión, tras el pitido final. Seis años después de su última participación en la Copa de Europa, la ciudad del Arcángel regresa a una competición continental: la Liga Europea (C2).
Hasta ahora, con la ida, los Raphaëlois solo habían tenido un pequeño anticipo de lo que les esperaba. El objetivo era validar su pase a la ronda preliminar, sin experimentar la remontada danesa. El descanso fue necesario para apagar cualquier esperanza en los jugadores del Mors-Thy. Si es que alguna esperanza había. En la misma dinámica de la ida, donde la victoria fue contundente (32-45), los Varois buscaron desgastar a los daneses desde el principio, tomar la delantera y disfrutar de una cómoda vuelta.
Un medio tiempo para ponerse a cubiertoCon una defensa diligente, el Saint-Raphaël solo encajó 13 goles en la primera parte. Los daneses tuvieron que probar algunas técnicas, como esta definición de kung fu por la banda izquierda de Magnus Amnitzbol Norlyk (9-7, 16.º). Y en ataque, el Saint-Raphaël estuvo impresionante. Gracias a su pareja de pivotes, Jonathan Mapu (4 goles en siete minutos) y Johannes Marescot. Ya fuera Sergio Pérez dando el pase o los demás jugadores de la zaga, los hombres de Benjamin Braux mostraron un gran nivel. Prueba de ello es el nuevo marcador, que muestra nueve goleadores diferentes al descanso, de catorce jugadores de campo. «Sabíamos que habíamos hecho el trabajo. Hicimos una buena primera parte. La segunda parte fue más descoordinada».
Porque, a diferencia de la ida, la vuelta fue menos impresionante. Los daneses intentaron salir con la cabeza alta, multiplicando los duelos y los disparos de larga distancia. "Sabíamos perfectamente que iban a jugar sin presión", admite el capitán del SRVHB, Johannes Marescot. "Eso da lugar a partidos bastante extraños".
Así, la ventaja de ocho goles se redujo a dos unidades. De 25-18 en el minuto 39, a 28-26 nueve minutos después. "No reconocí al equipo. Cuando pierdes desde el saque inicial, vuelves a ser un equipo mediocre", advierte el entrenador. "Jugamos un poco rápido al final. No creo que les guardemos rencor. Tenemos que disfrutar de la clasificación".
Un fin en los jefesGracias a su hiperactivo central español, así como al regreso al campo del entrenador defensivo Quinten Colman, el Saint-Raphaël volvió a la carga para celebrar la clasificación con una victoria, anotando 16 goles más en total. "Ganamos... ganamos bien", insistió el pivote. "La seriedad es primordial".
Por primera vez en el JFK Sports Palace, el club probó varias animaciones para asegurar un lugar para grandes noches. Como una temática de Star Wars durante un tiempo muerto en la primera mitad. La temática parece apropiada para un equipo que aspira a conquistar Europa. Anoche, SRVHB demostró su determinación de volver a destacar en el universo de Star Wars.
Var-Matin