Nintendo Switch 2: El temido drift en los Joy-Con regresa sin solución

El 5 de junio, la Nintendo Switch 2 llegó a las manos de millones de fanáticos en todo el mundo. Lo que debía ser un día de celebración se tornó en desconcierto para muchos: los primeros reportes confirmaban que el viejo enemigo de la consola original, el infame “drift” de los Joy-Con, podría haber vuelto… y con más fuerza que nunca.

Este problema, caracterizado por movimientos fantasmas en el joystick sin que el usuario lo toque, arruinó partidas, desató demandas colectivas y forzó a Nintendo a ofrecer reemplazos gratuitos. El lanzamiento de la nueva consola prometía dejar atrás estos fantasmas, pero el tiempo parece haberse detenido para algunos jugadores.

Lo más desconcertante no fue el regreso del drift, sino el motivo. A través de un desmontaje detallado del sitio especializado iFixit, se reveló que los Joy-Con 2 no utilizan sensores Hall Effect, una tecnología que evita el desgaste mecánico. En su lugar, Nintendo decidió continuar con potenciómetros tradicionales, aunque rediseñados.

¿Por qué evitar una tecnología más precisa y duradera? Según ingenieros consultados, podría deberse a que los sensores Hall Effect interferirían con el sistema magnético de fijación de los Joy-Con a la consola, una característica distintiva del diseño.

Nintendo habría priorizado la integridad estructural por encima de una solución definitiva al problema más criticado de su consola anterior.

La reacción no se hizo esperar. En redes sociales, foros como Reddit y canales de YouTube especializados en gaming, los comentarios se multiplicaron: decepción, molestia y resignación. Muchos usuarios esperaban que, tras años de quejas, Nintendo finalmente incorporara un cambio tecnológico sustancial.

Pero lo que llegó fue una versión “mejorada” del mismo control, con el mismo corazón frágil. Los fans más técnicos no tardaron en señalar que, aunque los materiales sean más resistentes, el desgaste será inevitable con el uso intensivo.

Hasta el momento, Nintendo solo ha declarado que ofrecerá reemplazo gratuito de Joy-Con defectuosos, tal como lo hizo en la generación anterior. Pero eso no es una solución, es un parche. Los usuarios esperan una innovación que elimine el problema de raíz.

¿Hay esperanza? Técnicamente sí. Existen ya soluciones de terceros con sensores Hall Effect disponibles en el mercado. Pero eso obliga a los jugadores a invertir más dinero para disfrutar de una experiencia que, se supone, debería estar garantizada por el fabricante.

No hay duda: la Nintendo Switch 2 ha comenzado con éxito en términos de ventas. Su eShop ya muestra los juegos más vendidos, que incluyen pesos pesados como Mario Kart 9 Deluxe y The Legend of Zelda: Echoes of Time. Sin embargo, la decepción por los Joy-Con 2 podría empañar la experiencia de quienes esperaban una consola sin compromisos técnicos.

Y así, la historia del “drift” se repite, una vez más, bajo nuevos colores… pero con el mismo mal funcionamiento.