Pese al bajo crecimiento, el SAT recauda más

A pesar de que la economía mexicana está registrando una notable desaceleración económica, el gobierno está logrando una creciente recaudación de impuestos.

Y lo está consiguiendo, sin aumentar, ni crear nuevos impuestos.

Es notable el contraste entre el bajo crecimiento y el aumento de la recaudación, que rebasó en 100% lo proyectado por el gobierno para el periodo.

El 30 de abril pasado, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), informó que la economía mexicana creció un 0.2% trimestral (respecto al cuarto trimestre de 2024) y un 0.6% anual (respecto al primer trimestre de 2024).

En el desglose de la débil tasa de crecimiento destacan dos datos:

1.- Las actividades secundarias es decir, la industria, manufactura y construcción: se contrajeron un -0.3% trimestral y -1.4% anual, reflejando debilidad en la construcción y la minería.

2.- Las actividades terciarias: servicios y comercio, mostraron un estancamiento trimestral (0% de crecimiento) y un crecimiento anual moderado de 1.3 por ciento.

O sea que dos de los 3 diferentes sectores económicos registraron recesión y estancamiento.

Lo que salvó a la economía general de la recesión técnica en el primer trimestre, fueron las actividades primarias: agricultura, ganadería y pesca.

Crecieron un 8.1% trimestral y 6.7% anual, impulsadas por un repunte significativo en la producción agrícola, el mayor desde 2011.

Aunque todavía no hay cifras para mayo, lo más probable es que el crecimiento económico acumulado en los primeros cinco meses sea muy bajo. Ese es el contexto del crecimiento económico.

En paralelo, el SAT ha venido difundiendo la tendencia al alza en los ingresos tributarios que recauda.

El Servicio de Administración Tributaria (SAT) presumió ayer que la recaudación tributaria alcanzó una cantidad total de 2.4 billones de pesos.

El monto representa un aumento de 8.8% en términos porcentuales y de 278,139 millones de pesos, en términos nominales, para los primeros cinco meses del año, en comparación con el mismo periodo del año 2024. El SAT destacó que con estas cifras se consolida la recaudación tributaria.

De hecho, supera, lo programado en el periodo, por la Ley de Ingresos de la Federación 2025, con un cumplimiento de 103.5%.

De manera desglosada, el organismo informó que de enero a mayo, se recaudó 1 billón 371 mil millones de pesos por concepto de impuesto sobre la renta (ISR).

Esa cantidad representa 149,902 millones de pesos más que en el mismo periodo de 2024 y un incremento real de 8.1%.

En cuanto a los recursos obtenidos por el Impuesto al Valor Agregado (IVA), estos alcanzaron 653,542 millones de pesos; 94,413 millones más respecto al mismo periodo del año anterior y un crecimiento real de 12.5 por ciento.

La recaudación del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) alcanzó 268,447 millones de pesos, 7,130 millones más que lo registrado en el mismo periodo de 2024. Sin lugar a dudas, son buenas cifras. Y son buenas noticias que se registre un aumento en la recaudación tributaria, a pesar de la desaceleración y estancamiento económico.

Sin embargo, en comparación con otros periodos, todavía está muy lejos del nivel más alto alcanzado en el sexenio de Enrique Peña Nieto, en virtud de la Reforma Fiscal que realizó.

Las cifras del SAT comparadas con 2024 (+5.8%) y 2023 (+4.1%), el crecimiento de 2025 es notable.

Sin embargo, es inferior al de 2013 (+17%) en el sexenio peñista.

¿Qué explica el crecimiento de la recaudación en el actual sexenio?

La eficiencia del SAT, la digitalización, la resiliencia del consumo y la depreciación del peso.

Sin embargo, lo cierto es que el escaso margen fiscal que tiene el gobierno de Claudia Sheinbaum, marca la creciente necesidad de una reforma fiscal estructural sobre el riesgo de la sostenibilidad de la estabilidad macroeconómica.

En días recientes el economista en jefe de BBVA Bancomer, Carlos Serrano, dijo que hacia el año 2027 es probable que México pierda el grado de inversión, si no se realiza una reforma fiscal.

Veremos.