La alternativa a cremación de cuerpos que se implementaría en Colombia, según nueva ley

La hidrólisis alcalina estaría cada vez más cerca de ser una realidad en Colombia, pues el proyecto que busca regular este método de cremación se encuentra en su último debate en el Senado de la República.

Cabe explicar que esta técnica, conocida como 'cremación con agua', ya se emplea en países como Australia, Estados Unidos y México, y se ofrece como una opción más económica y sostenible para reducir a los cuerpos humanos a sus restos óseos, sumergiéndolo en una mezcla de agua y sustancias químicas a altas temperaturas.

Este tema, sin embargo, ha generado opiniones divididas. Hay voces expertas que afirman que este método generaría dificultades para el sector forense en Colombia y también hacen mención de situaciones puntuales, como la desaparición forzada y el ocultamiento de cuerpos.

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"Desde el punto de vista forense es muy delicado porque básicamente desaparece al ser humano", aseguró el doctor Carlos Eduardo Valdés, exdirector del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, en declaraciones para 'W Radio'

También explicó: "El delincuente no va a cumplir la ley (…) se le abre una puerta maravillosa para las personas que están interesadas en desaparecer a otros seres humanos".

Por otro lado, personas a favor de esta iniciativa afirman que la hidrólisis alcalina genera menos emisiones de gases de efecto invernadero, por lo que el impacto ambiental es muchísimo menor frente al método de cremación tradicional.

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Pedro Suárez Vacca, representante del Pacto Histórico y uno de los autores del proyecto, afirmó para la misma emisora que este método es de gran ayuda para "tener una disposición de los restos mortuorios más respetuosa con el medio ambiente".

Mencionó, además, que este permite recuperar el agua utilizada: "Se extraen los químicos y pasa por plantas de tratamiento de aguas residuales, luego no se va a verter agua contaminada", aclarando que este procedimiento no se podrá aplicar a cuerpos de personas asesinadas violentamente o a presuntos criminales: "La ley contiene varios controles y podrían ampliarse si hace falta".

¿Cómo funciona?

El cuerpo de la persona fallecida es introducido en un recipiente hermético junto con una solución de agua con un compuesto alcalino (por lo general se utiliza hidróxido de potasio o sodio). Dicha mezcla se calienta a temperaturas controladas, lo que ayuda a acelerar el proceso natural de descomposición.

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A las pocas horas, ya cuando se completa el proceso de hidrólisis alcalinas, los restos de los huesos se secan y pulverizan, dando como resultado unas cenizas que se entregan a la familia, de forma similar a cómo se hace con la cremación convencional.

El líquido que queda después de la hidrólisis, técnicamente denominado como 'efluente', contiene sales, azúcares, aminoácidos y péptidos, además de ser estéril. Finalmente, este es desechado por el alcantarillado luego de un adecuado tratamiento.

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