El discurso de Trump en la ONU fue insultante y estúpido

Dios, si hubiera sido la escalera mecánica dorada la que falló en 2015, tal vez todos nos hubiéramos ahorrado la calamidad actual.

Sin embargo, fue la escalera mecánica del edificio de las Naciones Unidas que falló el martes lo que irritó a nuestro presidente. Recordé la frase del difunto Mitch Hedberg: le encantaban las escaleras mecánicas porque, cuando se estropeaban, se convertían en... escaleras. ¿Nuestro presidente? ¿Escaleras? Por favor.

Entonces su teleprompter falló, y eso lo irritó aún más. En cuanto a su discurso, bueno, insultó a la ONU, a la mayoría de nuestros aliados, a toda Europa y, por supuesto, al sentido común. Se extendió tres veces más de su tiempo permitido, pero una vez que se decide que la Constitución es una lista de sugerencias obsoletas, ¿qué importa la ONU y sus limitaciones de tiempo?

En esencia, el discurso fue grosero y estúpido, y fue recibido con un silencio sepulcral. Cabe destacar que nadie se rió de él esta vez. El mundo se ha dado cuenta de que la amenaza que representa para el orden público ya no tiene gracia. Nadie se rió de su testimonio de grandeza. Nadie se rió cuando llamó a la ONU ingratos por las famosas "siete guerras" que él mismo había detenido. Nadie se rió cuando calificó la crisis climática como "la mayor estafa" de la historia. El discurso fue insultante. En resumen:

Les digo que si no se alejan de la estafa de la "energía verde", su país va a fracasar. Si no detienen a gente que nunca han visto y con la que no tienen nada en común, su país va a fracasar. Amo a la gente de Europa y detesto verla devastada por la energía y la inmigración. ... Este monstruo de dos colas lo destruye todo a su paso, y no pueden permitir que eso siga sucediendo.

Lo del "monstruo de dos colas" es puro apocalipticismo secular. Siempre es un tema difícil.