La catarsis de Nine Inch Nails en NOS Alive: «Cuando te veo, cuando veo la luna, siento que estoy donde debería estar».

Nine Inch Nails regresó a Portugal y al escenario principal de NOS Alive, esta vez para el último concierto de la etapa europea de su gira "Peel It Back", donde repasan algunos de los grandes clásicos de una carrera impulsada por el metal y el calor industrial. El último día de Algés, Trent Reznor y sus compañeros también expresaron su deseo: mudarse a Portugal.

Amanece en el Paseo de Algés. Trent Reznor se aferra al micrófono con los ojos cerrados, Robin Finck lo acompaña a la guitarra y Atticus Ross está de pie frente al teclado. Es "Hurt", la canción más dolorosa de Nine Inch Nails, un auténtico himno a la autodestrucción, la que se escucha en el escenario NOS en este último día de NOS Alive. Hay un silencio casi sepulcral en el público, interrumpido por un par de silbidos y algunos susurros. En ese momento, como siempre ocurre cuando toca esta canción en directo, Reznor pareció expulsar todos los demonios que vivían (y aún viven, aunque en menor medida) en su interior; al mismo tiempo, realizó un exorcismo a todos los que se acercaron al escenario solo para ver a Nine Inch Nails. Este no es el nombre de una banda. Es el nombre de una terapia.