El aumento del 400% de las animadoras de los Dallas Cowboys es un recordatorio de lo poco que ganan las atletas femeninas.
Si usted está entre los millones de personas que quedaron fascinadas con America's Sweethearts , la docuserie de Netflix sobre las animadoras de los Dallas Cowboys, entonces ya sabe que las 36 mujeres que integran el equipo son nada menos que atletas profesionales.
La mayoría proviene de estudios de danza. Se someten a rigurosos programas de entrenamiento y tienen que cumplir con intensas exigencias físicas: su característico movimiento de patada en línea y salto-split es tan exigente que algunas se han desgarrado la cadera hasta el punto de necesitar cirugía .
Desde julio hasta el final de la temporada de los Cowboys, ensayan de tres a cuatro veces por semana durante dos o tres horas cada vez y actúan en todos los partidos en casa. Los entrenamientos por sí solos pueden suponer una dedicación de 40 horas semanales, según la revista People , y eso no incluye sus apariciones promocionales.
Y a pesar de todo esto, hasta hace poco, se decía que no les pagaban lo suficiente para mantenerse . Como han señalado las propias animadoras del programa, muchas de ellas tienen un segundo o incluso tercer trabajo.
Ahora, se ha estrenado la segunda temporada de America's Sweethearts , junto con un anuncio significativo: un aumento salarial del 400 por ciento .
"Nuestros esfuerzos fueron escuchados y quisieron darnos un aumento", dijo Megan McElaney, veterana de cuatro años, en el programa, calificando el aumento de "un cambio de vida".
El programa no reveló cuánto ganaban las animadoras antes del aumento salarial ni cómo sería su compensación después. Sin embargo, la exanimadora Jada McLean declaró al New York Times el miércoles que ganaba 15 dólares estadounidenses por hora durante sus cinco años como veterana en el equipo, y con el aumento salarial, podría rondar los 75 dólares estadounidenses por hora.
Si bien muchos se sorprendieron al saber lo poco que se les paga a las animadoras de la NFL, esto encaja en la narrativa general de la brecha salarial de género en el deporte femenino, dijo Cheri Bradish, directora del Future of Sport Lab en la Universidad Metropolitana de Toronto.
"Existen desigualdades para las mujeres en el deporte en todo tipo de roles, no solo en el de animadoras", dijo Bradish a CBC News.
Su trayectoria es muy similar a la que hemos visto en otras ligas y equipos que luchan por obtener el respeto de una remuneración más amplia y respetada en general.
Ser animadora es un compromiso importante que exige un alto nivel de atletismo, dedicación y profesionalismo, dijo Raeanne Milovanovic, cofundadora y vicepresidenta de la Organización de Ex Alumnas de Animadoras de Fútbol Canadiense.
La compensación varía según el equipo y ha sido históricamente un tema de debate, dijo Milovanovic. Los estipendios no suelen equivaler al salario mínimo, añadió, pero existen otras ventajas y oportunidades de ascenso, y para muchos, lo importante es la experiencia.
"Para muchos, es un puesto de voluntariado", dijo.
Las animadoras de la CFL normalmente no reciben un salario fijo regular, sino que reciben pagos por partido de entre 50 y 100 dólares estadounidenses por partido, según CFL News Hub .
Las discrepancias salariales están ganando cada vez más atención a medida que el deporte femenino experimenta un aumento masivo en popularidad.
Superestrellas como Caitlin Clark de la WNBA, la gimnasta estadounidense Simone Biles, la jugadora de rugby Ilona Maher y la nadadora canadiense Summer McIntosh, que batió récords, han ayudado a atraer más miradas hacia los eventos, como también lo ha hecho el surgimiento de nuevas ligas profesionales femeninas de hockey y fútbol.
Sin embargo, los cheques de pago no han seguido ese ritmo.
Se proyecta que Paige Bueckers, por ejemplo, la primera selección del draft de la WNBA, gane tan solo $78,831 dólares estadounidenses en su año de novata, unos $109,480 dólares canadienses, menos que el ingreso familiar promedio real en Estados Unidos . Las jugadoras de la Liga Profesional de Hockey Femenino (PHL) pueden ganar tan solo $35,000 dólares estadounidenses al año.
En marzo, un informe de la FIFA sobre fútbol femenino reveló que el salario promedio de los equipos de primera división era de 24.030 dólares estadounidenses a nivel mundial, inferior al salario mínimo en muchos lugares. Y a pesar de que en 2024 se registró un auge de atletas femeninas virales, ninguna mujer figuró en la lista de las 100 atletas mejor pagadas del mundo el año pasado.
Las animadoras de Dallas llevan años presionando por aumentos salariales, como parte de una batalla general de las animadoras de la NFL por el salario mínimo . En 2017, un juez federal desestimó una demanda que acusaba a la NFL y a los dueños de los equipos de conspirar para suprimir los salarios de las animadoras.
En 2019, los Cowboys resolvieron una demanda con una exanimadora, lo que llevó al equipo a duplicar el salario por partido, de 200 a 400 dólares estadounidenses. El último aumento es cuatro veces mayor.
"'Feliz' ni siquiera es la palabra adecuada", dijo la ex animadora Jada McLean en el programa. "Creo que simplemente sentí... una especie de alivio, como si todo hubiera valido la pena. Y fue, ya sabes, que por fin habíamos terminado de pelear".
Robyn Pineault, de 42 años, animó a los Hamilton Tiger-Cats y a los Toronto Argonauts a principios de la década del 2000. Además de los entrenamientos y las apariciones públicas, Pineault dice que bailaba todo el partido en la banda, además de los espectáculos del medio tiempo y entre cada cuarto, todo lo cual era físicamente exigente y requería mucho tiempo.
Pineault, que ahora vive en Ottawa, dice que está orgullosa de las animadoras de Dallas por presionar por un aumento salarial.
"Son el epítome del reconocimiento de marca en la industria. Todas las animadoras admiran a las animadoras de los Dallas Cowboys", dijo.
"Por eso, verles aumentar su salario y que realmente se les pague lo que merecen, no solo tener la oportunidad de bailar y tener una carrera, sino también un salario justo, es una gran noticia para los bailarines de todo el mundo".
cbc.ca
