Ejercicio ilegal de la profesión médica por parte de la esteticista que utiliza instrumentos incluidos en la base de datos de productos sanitarios

Las máquinas utilizadas por los centros de estética, como los láseres y equipos de luz pulsada de alta intensidad para el fotorejuvenecimiento de la piel, tatuajes o depilación u otros tratamientos dérmicos, deben utilizarse bajo supervisión de un médico, independientemente de las instrucciones del fabricante, pues de lo contrario constituye un delito de ejercicio no autorizado de la profesión médica. De lo contrario, se vulneraría el principio de precaución establecido en el artículo 191 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea.

En estos términos, la Corte de Casación (sentencia n. 15742 de 2025) consideró intachable el auto con el que el Tribunal de Perugia rechazó la solicitud de reexamen propuesta por el propietario de un centro de estética contra el decreto que validaba la incautación de un dispositivo antienvejecimiento incluido en la base de datos nacional de productos sanitarios.

En el recurso de apelación contra la orden judicial, el acusado había argumentado que:

- la base de datos de dispositivos médicos “es un sistema de registro y trazabilidad creado para recopilar información sobre todos los dispositivos médicos comercializados, pero no tiene autoridad legal para definir o cambiar el uso previsto de una máquina”;

- El Reglamento (UE) 2017/745 sobre productos sanitarios asigna al fabricante la tarea de proporcionar las especificaciones técnicas sobre los métodos de utilización;