Desaprobación de Lula alcanza nivel más alto desde enero de 2024; La economía y la corrupción son una preocupación

La desaprobación del gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT) alcanzó su nivel más alto desde enero de 2024, según la nueva ronda de la encuesta AtlasIntel/Bloomberg divulgada este viernes (30). La valoración negativa alcanzó el 53,7% e interrumpió la primera caída registrada el mes pasado, cuando alcanzó el 50,1%.

Por otro lado, la aprobación cayó del 46,1% en abril al 45,4% en mayo. Según la encuesta, los problemas económicos y la corrupción preocupan a los brasileños:

AtlasIntel encuestó a 4.399 personas entre el 19 y el 23 de mayo a través de un reclutamiento digital aleatorio. El margen de error es de 1 punto porcentual con un nivel de confianza del 95%.

La interrupción en la baja de la desaprobación se da en medio de otra crisis creada por el gobierno, la del aumento del IOF por parte del Ministerio de Hacienda, que generó quejas del Congreso, que asegura no haber sido advertido. Fue el segundo más grave del año bajo el mando del publicista Sidônio Palmeira en la Secretaría de Comunicación Social (Secom) de la Presidencia de la República, contratado por Lula para mejorar su popularidad de cara a la reelección en 2026.

Las sucesivas crisis e incluso las polémicas declaraciones de Lula no han ayudado a la labor de Palmeira, que ahora ve un aumento de las evaluaciones negativas en mayo.

Según AtlasIntel, la valoración mala/pésima también se disparó respecto a abril y alcanzó el 52,1%. La calificación excelente/buena tuvo un ligero aumento y se ubicó en 41,9%, mientras que la calificación regular bajó a 6%:

La mala/pésima evaluación de Lula se da principalmente entre las mujeres, personas con educación secundaria completa, de 35 a 44 años y beneficiarios de la Bolsa Família (53,2%); residentes del Centro-Oeste, Norte, Sur y Sureste; con ingresos familiares de hasta R$ 5.000 y entre los evangélicos (71,5%).

Los entrevistados por AtlasIntel afirmaron que Lula ha tenido un desempeño peor que Bolsonaro, especialmente en temas económicos y sociales:

• Responsabilidad fiscal y control del gasto: 55%;
• Seguridad pública: 54%;
• Impuestos y carga fiscal: 53%;
• Agricultura: 53%;
• Entorno empresarial y creación de empleo: 52%;
• Justicia y lucha contra la corrupción: 51%.

Para el 59,5%, la corrupción sigue siendo el mayor problema que enfrenta Brasil, seguido de la delincuencia y el narcotráfico (50,2%) y la economía y la inflación (29,4%):

Más de la mitad de los entrevistados (51%) cree que Brasil vive una mala situación económica en su conjunto, pero con una perspectiva de mejora del 45% técnicamente empatada con un pesimismo del 44%.

También aumentó el pesimismo respecto a la inflación, ya que un 44,4% de los encuestados afirma que debería realizar menos compras de bienes duraderos, mientras que un 28,6% espera comprar más y un 23,9% no ve cambios en su intención de realizar nuevas compras.